El cuidado de los niños y las niñas
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Es un hecho que este sistema de vida nos arrastra a
una frialdad absoluta; con la integridad de nuestro ser más dividida y
deteriorada. El modo de vida que llevamos sumado a las tecnologías y demás, nos
están dejando muy maltrechos.
Todos sabemos cómo está hoy la
adolescencia y la juventud. En otras décadas, fueron la chispa, la llama
creativa y el temblor de la tierra… Hoy, apenas sin fuerzas. La adolescencia es
una depresión que se ahoga en juegos de la play. Y la juventud un agachar la
cabeza entre semana, para alcoholizarse, drogarse, o jugarse el dinero al azar el
fin de semana.
Hoy pongo sobre la mesa la carta
más importante que tenemos, los niños. Y pido una tabla de salvación para ellos,
que abramos bien los ojos, que nos echemos un cubo de agua fría en la cabeza si
es preciso y que espabilemos!! Pues de seguir el rumbo marcado, los arrojaremos
a un futuro muerto!!
Es por ello, que en este pueblo,
que es Aspe, quiero abrir una brecha que desafíe el aislamiento, la soledad y
la frialdad, que cada vez más, rodea la crianza de nuestros peques. Es mi
intención crear un espacio diferente donde niños y jóvenes puedan relacionarse
de forma espontánea y natural en las situaciones cotidianas del día a día,
simplemente compartir el presente, afrontando y experimentando lo que ocurra,
aprendiendo momento a momento de esas interacciones personales, tan necesarias
e importantes para el desarrollo psicológico, emocional y cognitivo de la
infancia.
Nada enriquece más a las
personas que otras personas, por eso quiero que mis hijas crezcan viendo muchos tipos de personas, cuantas más mejor. Y
no me refiero a que sepan que existen otras personas, o gente diferente a
ellas, sino a que caminen y beban de ellas. Porque yo sin ti, sin aquel, sin
esta, sin los de allá…, soy un “yo” disminuido; porque mi “yo” se nutre de tu
mirada, tu cabreo, tu sonrisa, tu forma de mover las manos cuando hablas, etc.
Y cuando más se nutre de todos; más fuerte, grande y hermoso se hace. Por eso,
démosles a nuestros hijos abundancia y riqueza de seres, de los que coger o
rechazar maneras de ser, con los que encariñarse, cabrearse, o lo que surja. Démosles
un escenario rico donde ensayar la vida para el futuro que se les viene.
Para esto, desarrollemos un modo
de estar distinto al que vivimos, que apueste por el enriquecimiento personal
de nuestros hijos (y el nuestro propio), y que, a su vez, haga más fácil la
gestión del tiempo adulto y genere armonía en nuestras vidas. Al principio requerirá
esfuerzo por parte de todas y todos, pero eso es como todo, a mayor esfuerzo
mayor recompensa. Y sólo con nuestro empeño podremos cambiar el futuro de
nuestros hijos, pues el mejor ejemplo de lo que les espera, ya lo tenemos en la
juventud de hoy.
Para seguir recibiendo
información sobre este proyecto, participar en él, o aportar ideas, puedes
dejar tu contacto aquí:
Correo electrónico: sendasilvestre@hotmail.com
Teléfono: 678579203 Cristina
Un saludo.
Cristina (madre y persona preocupada por la
desnaturalización humana)
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